martes, 17 de agosto de 2010

[ EL OFICIO... ]

No me da la gana. Yo no escribo por encargo...A mi me produce un poco de costra esa cuestión de complacer.Los ñoños y la cita , la cara lavada,y esa inminente mentira conyugal.Cuanto placer me produce burlar una custodia que basa su fidelidad en un conjuro de yerbas.


Mi vida entera a voluntad.Pasando del frío.Una cama caliente, eso a mi...se me da con mucha facilidad.Por más protesta, hay ninfas con suerte y otras en calidad de mueble.Y que conste que no hablamos del prototipo, ese no es el punto.



Hoy escribiré de las putas.Las mías, las tuyas, las del que se deje...



En el año de mil novecientos no me acuerdo, perdí mi virginidad.De eso si me acuerdo.Él también.Lo sé porque hablamos de ello la semana pasada.Como somos tan civilizados, acostumbramos compartir la cama periódicamente.Nada ha cambiado desde ese día.Para mi un hombre...es él.Sus manos, con tremenda habilidad y talento.Su boca, esa boca.Ningún misterio,ningún pecado.Todo entre nosotros es permisible.Yo no tengo que preguntar, el me adivina.



La primera vez que lo vi, ni fu ni fa.Después fu y fa.Y todos los monosílabos...



Me ha visto ir y venir.Jalando, empujando, arrastrando.Para el tiene sentido que me pase la vida buscando.No se lo he preguntado.No tiene caso.


En una ocasión, una mujer que conocí en un bar, me dijo que las putas tienen mucha dignidad.Más que las "señoras".Que nunca permiten ser humilladas por otra mujer.Los hombres, no cuentan.
Son todas rameras de por vida.No tiene nada que ver si la piel se sostiene ó se acomoda.Saben su oficio.La boca.Tiene que ser eso. Es su secreto.Mojan con la lengua cada centímetro de su amante hasta que los fluidos se incorporan proporcionalmente.Siempre repasan el espacio con sus manos.


Si tuviera una amante, sería una puta.Una con grandes senos y que no pase de veinticinco.Que se mantenga caliente, de ser preciso.Y que no le de por pensar.Por eso es puta.Si quiero platicar,me consigo un amigo.Ahora, que si por azares del ¿destino? me encuentro con una hembra, que además de guapa resulte lista y dominante...eso es demasiada suerte.¿Porque todas las mujeres que valen la pena, se niegan a ser putas...? Yo no...creo que, todas.Pero si la mayoría.



No voy cambiar de opinión.Ese asunto de la entrega tiene que ser, exquisito.Siempre que vengas a mi...es TODO.




Desde la trinchera...defendiendo el oficio

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