sábado, 25 de abril de 2009

...MAR...

De que se está diferente abajo, se está. Hay más silencio.

El mar es cómplice perfecto para el corazón. Debe ser la sal, que cauteriza de todo.

Como recordarás, me sacaste de tu vida. Pensé que si de plano me dejaba ir al fondo no vería como te desvanecías.

El dolor era insoportable. No se trataba de presenciar como estallaban los pulmones, eso era inminente y hasta necesario.

El dolor era por tu partida.

Para cuando la luz del sol se perdió, me desfiguré por completo. No se está nada mal en ese momento. Y supe que era todo.

No llegó ningún ángel, no llegó el demonio, ni llegó dios. Estaba solo YO.

Hay que tener un poco de práctica con los poddle, si se haya en medio de la nada, hace falta lanzarse uno mismo.

Pues no me ha quedado de otra que rediseñarme.

Para mí que se me pasó un poco la mano con los efectos especiales. Pero en éstas viandas de la escribidera, funcionan perfecto.

A penas llevo un par de días entrando y saliendo. ¡Que esperanzas de antes imaginar que puedes ser de tierra, de aire y de agua al mismo tiempo!

Solo me falta una cosa...Tocar el sol.

Es verdad que le temo. Y es tanta mi fascinación por él, que mejor no me le acerco.

Acá las historias de cuentos se hacen reales.

Los Dragones sí existen. Todo deseo en sí, ha de manifestarse.

Hemos sido hechos a imagen y semejanza. No hay duda.

Voy a tener cuidado. Me gustó demasiado el asunto de disolverse…y volver a reinventarse.

Escrito Por Erika Molina Prado.

1 comentario:

  1. Claro que se esta mejor abajo..

    me ha gustado..

    te sigo leyendo..

    saludos fraternos
    un abrazo

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